ANTIGUO INSTRUMENTAL MÉDICO



El interés en el instrumental médico antiguo ha ido creciendo en el tiempo tanto entre los profesionales médicos como entre la población en general. Aunque para algunos la mera visión de agujas, bisturíes… puede provocar “grima”, hay algo en el instrumental médico antiguo que causa verdadera fascinación entre sus coleccionistas.
Los kits de cirujano completos, con sus bisturíes y sondas están entre los coleccionables médicos más buscados, sobre todo, los que han sido usados por los médicos militares durante un periodo de guerra. Pero también están en el foco de atención los instrumentos asociados a enemas sangrías o los propios de los boticarios.
Antiguos instrumentos romanos de bronce
                                                                      


Los comienzos de la medicina

Desde tiempos prehistóricos se han utilizado plantas y minerales para fines médicos. Las investigaciones arqueológicas han encontrado evidencias de cirugía, más en concreto, trepanaciones (literalmente taladraban el cráneo), se supone que ese tipo de operación se hacía para librar a los pacientes de los demonios que les atormentaban y hacían enfermar, e incluso científicos han encontrado que algunas de esas operaciones tenían éxito!!!
El primer registro escrito de instrumentos que conocemos , apareció en los textos del filósofo griego Hipócrates sobre el 460  AC y los instrumentos que describe así como las técnicas son particularmente similares a las que podemos encontrar 2000 años más tarde, lo que muestra el poco avance que se dio en el campo de la medicina hasta mediados del XIX.
Hacerse con objetos médicos de la época griega puede ser algo “dificultoso”. Los objetos supervivientes de aquella época son extremadamente raros, la mayoría están fabricados en bronce y están en museos.
En cuanto a Roma y datados en el año 1 DC también encontramos cantidad de instrumentos, destacando los utilizados para amputaciones (este post va mejorando por momentos). De hecho, ese tratamiento un tanto “radical” no estaba muy extendido, ni se usaba tan ligeramente, lo que daba a los pacientes en la Antigua Roma una opción más real de supervivencia, tras el “encuentro” con el físico, que en los posteriores 1700 años
Aunque raros los objetos quirúrgicos de la época romana se pueden encontrar a la venta pero claro su precio es altísimo por piezas en buenas condiciones (para su edad) y aún más para un conjunto. Por ejemplo por un raro kit quirúrgico romano datado de alrededor del año 100 DC se pagó $10.000 no hace mucho. En Roma los boticarios usaban cofres para sus “medicinas” pero estos también están en su mayoría en museos.
Los instrumentos médicos de la Edad Media, (entre el 1000 y el 1400 DC) y posteriores son con mucho bastante más accesibles para los coleccionistas Y las piezas de los siglos 17 al 19 son aún más asequibles y por ello más populares entre los coleccionistas.
A partir de la mitad del XIX con la introducción de la esterilización las piezas comenzaron a ser menos ornamentadas para facilitar su esterilización y materiales tales como madera, marfil, concha de tortuga y otros materiales que hoy nos podrían resultar más decorativos, dejaron de usarse.



Cuchillo de amputación del S XIII


Yo, en este punto haría hincapié en que en el coleccionismo de instrumentos médicos también hay en el mercado falsificaciones aunque en apariencia sean auténticosy repito “en apariencia” por lo que aunque el precio sea mayor es mejor adquirir las piezas de un profesional o en una casa de subastas seria.



Inicianr tu propia colección

Iniciar cualquier colección es una opción personal, de todas formas tanto quien base su colección en un área específica de la medicina o un instrumental específico que ha ido cambiando a lo largo del tiempo como quien se hacen simplemente con piezas que captan su interés, hay una premisa a seguir, compra calidad, no cantidad. La experiencia demuestra que muchos coleccionistas se quedan antes sin espacio que sin dinero y que las colecciones de mayor valor son las que se basaron en la calidad, rareza o procedencia dejando el precio en un segundo plano.
Generalmente los instrumentos que se encuentran en cajas y cuanto más intactas mejor tienen un valor mayor que las que se encuentran por separado, siempre teniendo en cuenta las características de la pieza suelta que por su rareza o procedencia puede ser de alto valor.
Desconfia de las piezas demasiado baratas a no ser que tengas la seguridad de haber dado con una ganga lo que no es habitual. Como ya he mencionado, las reproducciones pueden estar muy bien hechas y parecer auténticas, como se da entre los tarros de farmacia que pueden confundir al ojo más entrenado. Examina los objetos detenidamente a ser posible, ten en cuenta los materiales de las cajas y que  las marcas del paso del tiempo están tal y como corresponde, plástico, aluminio o poliéster son materiales bastante “modernos”.
Si estás interesado en este tipo de colección hay profesionales de confianza que te pueden asesorar. Como en toda colección la información es primordial  


Instrumental médico de 1800